Becquer

Asomaba a sus ojos una lágrima y a mi labio una frase de perdón; habló el orgullo y se enjugó su llanto, y la frase en mis labios expiró.Yo voy por un camino; ella, por otro; pero, al pensar en nuestro mutuo amor, yo digo aún: —¿Por qué callé aquel día? Y ella dirá: —¿Por qué no lloré yo?

miércoles, 1 de abril de 2009

Inevitablemente tú no vas a regresar y sabes qe en todo lo qe te llevaste hay algo qe me pertenece y tiene qe volver a mi.

No hay comentarios:

Publicar un comentario