Becquer

Asomaba a sus ojos una lágrima y a mi labio una frase de perdón; habló el orgullo y se enjugó su llanto, y la frase en mis labios expiró.Yo voy por un camino; ella, por otro; pero, al pensar en nuestro mutuo amor, yo digo aún: —¿Por qué callé aquel día? Y ella dirá: —¿Por qué no lloré yo?

jueves, 4 de marzo de 2010

A veces se me olvida quien soy.
A veces se me olvida que los sueños,
son solo eso..
a veces se me olvida
que soy un juguete del destino..
a veces se me olvida que
con llorar el dolor no termina..
a veces, solo a veces..
se me olvida que sigo viva.

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