Becquer

Asomaba a sus ojos una lágrima y a mi labio una frase de perdón; habló el orgullo y se enjugó su llanto, y la frase en mis labios expiró.Yo voy por un camino; ella, por otro; pero, al pensar en nuestro mutuo amor, yo digo aún: —¿Por qué callé aquel día? Y ella dirá: —¿Por qué no lloré yo?

martes, 28 de junio de 2011

No vas a cambiar, 
se que me mientes... 
me vas a dejar 
y aunque te cueste, 
no vas a jugártela por mi, 
y aunque tanto te pedí, 
seguiré siendo la otra.. ♪

No hay comentarios:

Publicar un comentario